Busco a solas las llaves oxidadas
de mis recuerdos vanos,
encerrados a cal y canto, ocultos
en la profundidad de la apatía.
Afanes de ideales
que entre yermas
quimeras se perdían,
pasando entre los dedos como el trigo,
cayendo grano a grano, día a día,
en el vértigo amargo
donde reclamo abrigo
para mi sed, mi frío y mi agonía.
(Agosto 2007)
2 comentarios:
Precioso poema ,maravillosa lectura ,besos
Muchísimas gracias por venir a leer mis poemas. Un abrazo.
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