¡Ay, alma! ¿Por qué penas?
¿Perdiste la batalla y
consumida
arrastras las cadenas
que dejan malherida
a la flor deleitable de la vida?
¡Ay, breve primavera
que bordeas los trances
del olvido!
¡Galopante carrera
de corto recorrido,
fugacidad del tiempo
trascurrido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario